El domingo 25 de mayo no fue un día más en Roland Garros. Rafael Nadal, el máximo ídolo del torneo, recibió un emotivo homenaje por parte de la organización del Grand Slam parisino.
En su posible despedida del certamen, el público se tiñó de ocre con una remera especial que decía “Merci Rafa” (Gracias Rafa), y que ya se transformó en un objeto codiciado dentro y fuera del estadio.
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Unas 10.000 camisetas fueron distribuidas gratuitamente en las gradas del Philippe-Chatrier, con la fecha del tributo estampada. El momento fue tan impactante como simbólico: el propio Nadal se emocionó al ver el mar de camisetas entre los fanáticos, en un escenario que lo vio levantar 14 títulos y consolidarse como leyenda.
Sin embargo, lo que comenzó como un gesto de gratitud terminó convirtiéndose en un fenómeno comercial. Apenas concluido el acto, las plataformas de reventa online, especialmente Vinted, comenzaron a llenarse de publicaciones ofreciendo la codiciada remera. Los precios arrancaron en 100 euros y en pocas horas algunas alcanzaban hasta los 550 euros.
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La prenda de algodón ocre, que para muchos asistentes será un recuerdo sentimental imborrable, se transformó en una pieza de colección en el mercado secundario. Las fotos de las publicaciones muestran a los vendedores aún en el estadio, luciendo o sosteniendo la remera, lo que da cuenta del valor inmediato que adquirió.
Este fenómeno confirma que Rafael Nadal no solo deja un legado deportivo, sino también una marca emocional y cultural. El homenaje en Roland Garros se convirtió en un momento histórico, y la remera “Merci Rafa” ya forma parte del merchandising más simbólico del tenis mundial.
Fuente: LA NACIÓN.