Riba es uno de los 19 imputados por el caso que conmovió la opinión pública local el miércoles pasado, y está imputado de asociación ilícita simple en carácter de coautor y usura agravada, mientras que los detenidos en la cárcel de Bower, Saillen y Catrambone, están imputados también por asociación ilícita, administración fraudulenta y lavado de dinero.
El fiscal federal Enrique Senestrari, a cargo de la investigación, expresó a los medios: «Uno piensa que las personas investigadas toman alguna precaución de disimulo, de dibujo, de desvío de pruebas, para evitar ser descubiertos de una forma tan contundente como fue en estos procedimientos».
Aunque se mostró sorprendido con lo hallado hoy: «Esto causó sorpresa porque uno piensa que después de semejante situación no va a encontrar mucho, pero lo tiene que ir a buscar», dijo el fiscal.
Los detenidos Saillén y Catrambone sabrán entre mañana y el miércoles la decisión del camarista Luis Rueda, que resolverá sobre en quién va a caer la causa principal, porque el juez Ricardo Bustos Fierro ya pidió el apartamiento.
Si se acepta el reclamo de Bustos Fierro, sería el juez federal Hugo Vaca Narvaja quien asuma el cargo de la investigación.
La semana pasada, los allanamientos que se realizaron en la sede del gremio y en domicilios particulares dejaron como resultado el secuestro de 11 vehículos de alta gama, joyas y una suma cercana a los ocho millones de pesos en efectivo en la casa de uno de los dirigentes.
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