Jorge Gorini, el magistrado encargado de determinar las condiciones de detención de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, comenzó este lunes una licencia, justo en el momento más álgido en el procedimiento. La ausencia deja en suspenso el pedido de prisión domiciliaria de la actual presidenta del Partido Justicialista.
Gorini es el encargado de dar luz verde o rechazar el pedido de arresto en el domicilio de la exmandataria, pero con el inicio de su licencia el procedimiento permanecerá sin resolución hasta que el magistrado retome sus funciones. Esto podría prolongar tanto el debate jurídico como el político en torno a CFK.
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Esta situación deja así en evidencia la importancia de cada paso en el procedimiento de detención de una de las figuras más relevantes de la política argentina. La opinión de Gorini es clave para determinar en qué lugar permanecerá bajo arresto la expresidenta, en un marco de enorme tensión institucional.
En el entorno de CFK creen que esta ausencia podría dar lugar a más dilaciones en el procedimiento, aumentando así la incertidumbre tanto en el plano jurídico como en el político. Por eso están pendientes de cualquier resolución que pueda surgir en el regreso de Gorini o de aquel que lo reemplace en el tribunal.
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Sin embargo, tanto en el oficialismo como en la oposición están a la expectativa de lo que pueda ocurrir en las próximas semanas. La opinión del magistrado marcará así el futuro de una de las figuras más emblemáticas de la política nacional, en un contexto marcado tanto por el procedimiento jurídico como por el debate en la opinión pública.
Fuente: Minuto Uno.