El volcán Canlaón, ubicado en la isla de Negros, lanzó una columna de ceniza de tres kilómetros de altura, lo que llevó a las autoridades a mantener el nivel de alerta 3. Más de 11.700 personas fueron evacuadas como medida preventiva.
La Oficina de Defensa Civil de Filipinas informó que la mayoría de los evacuados provienen de La Castellana, en Negros Occidental, y Bago, en Negros Oriental.
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Mientras tanto, el Departamento de Salud emitió alertas sobre las consecuencias para la salud, como enfermedades respiratorias y contaminación del agua, instando a usar mascarillas N95 y evitar el contacto con cenizas.
La región ha registrado seis terremotos recientes, lo que agrava la situación. La erupción del volcán provocó la cancelación de vuelos, retrasos y suspensión de clases en las zonas afectadas. Filipinas, en el Anillo de Fuego del Pacífico, es propenso a alta actividad sísmica y volcánica.
Fuente: Telesur.
