Los ciudadanos de Moldavia se dirigen a las urnas este domingo en una segunda vuelta electoral que definirá el rumbo del país: la candidata Maia Sandu, de orientación proeuropea, compite contra Alexandr Stoianoglo, quien promueve fortalecer los lazos con Rusia. En la primera ronda, Sandu lideró con un 42% de los votos, frente al 26% obtenido por Stoianoglo. Dado que ninguno alcanzó el 50%, la votación se repite en un ambiente de alta polarización.
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La situación de Moldavia, una de las naciones más empobrecidas de Europa, refleja las tensiones geopolíticas que enfrenta el país entre las influencias de Occidente y Moscú. La nación, que fue parte de la Unión Soviética, mantiene su deseo de unirse a la Unión Europea, pero su proximidad con Rusia y los vínculos económicos con Moscú dividen a la población en dos visiones enfrentadas sobre el futuro nacional.
En medio de esta contienda, se han alzado preocupaciones sobre posibles prácticas de fraude electoral. En el reciente referéndum nacional, los moldavos aprobaron por un estrecho margen su intención de adhesión a la Unión Europea. Sin embargo, las fuerzas de seguridad moldavas denunciaron un supuesto esquema de compra de votos orquestado por el oligarca exiliado Ilan Shor, quien vive en Rusia y es acusado de pagar millones de euros para influir en favor de la opción prorrusa.
El caso de Shor, acusado de destinar 35 millones de euros a la compra de votos, se suma a las crecientes denuncias de fraude electoral. Aunque Shor niega las acusaciones, el clima de desconfianza ha aumentado en este contexto electoral, ya que se teme que estos actos puedan influir en el resultado y desestabilizar la voluntad popular. Sandu y su equipo han advertido que reforzarán los controles para evitar irregularidades.
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Según los expertos, el resultado de estas elecciones tendrá implicaciones no solo para Moldavia, sino también para la estabilidad geopolítica en la región. Mientras Sandu representa un futuro más cercano a la Unión Europea, Stoianoglo aboga por estrechar relaciones con Rusia, abriendo el país a una mayor influencia de Moscú en un periodo crítico para la región.
Fuente: Euronews.
Foto: RTVE.