Los detalles del caso los brindó a Radio 3 el propio Javier Sastre, un vecino de 49 años que desde hace 5 años se realiza diálisis y se encuentra a la espera de un trasplante de órgano. El hombre tiene un problema genético y tiene el antecedente familiar de su madre, que sufrió lo mismo que él.
Javier explicó que “una persona que espera un órgano, cada un año tiene que renovar los estudios pretrasplante -a partir de los cuales- se lo evalúa y sale si puede ser trasplantado o no”.
En este contexto, con la pandemia de Covid comenzada el año pasado, “se me venció el estudio”. En ese momento, en los primeros meses de la pandemia, se comunicó con el Hospital El Cruce de Buenos Aires donde “me dicen que por el momento no hacían el estudio”.
Desde entonces “me comunico con mi obra social (OSBLYCA) y me decían siempre que no renovaron el estudio –hasta que- hace un mes se me ocurrió comunícame directamente con El Cruce”.
Allí, la Institución médica “me comunica que sí están haciendo el estudio pero que mi Obra Social dice que hay problemas con los vuelos”, ante lo cual se percata que “me están pasando mal, porque vuelos hubo entre ola y ola, fue una excusa que pusieron”.
“La doctora me dice ‘venite ahora’ y comienza el ping pong. La obra social me pidió hasta por escrito y me salieron con que no me autorizan a ir a Buenos Aires hasta que no tenga la 2ª dosis de la Sputnik V”, ya que el paciente había recibido la primera dosis.
Mientras todo esto pasaba “hubo otros pacientes en diálisis que esperaban trasplante y entre ola y ola fueron, se hicieron los estudios e incluso hubo 2 trasplantados en Trelew”, reveló.
Ante todo esto, entre lágrimas, el vecino evaluó que “podría estar trasplantado, o no, pero por lo menos tener los estudios y estar en la lista de espera, hoy no estoy en la lista de espera y se lo tengo que agradecer a la Obra Social”.
Lamentó así que en general las obras sociales “juegan con los enfermos, con los jubilados, con los discapacitados. Dan tantas vueltas para que uno se canse”, puntualizó.
Remarcó que en su caso “estoy en diálisis pero me estoy desgastando. La diálisis me mantiene vivo pero me va desgastando los órganos -aunque- el problema lo tengo yo, no la obra social”.
Subrayó que la 2ª dosis de la vacuna contra el Covid “es la excusa que pone la obra social. Lamentablemente dependo de ellos, sino yo tengo que organizar las diálisis en Buena Aires y todo es muy complicado, sino me iría por mi cuenta”.
Cerró denunciando que en una ocasión, “me dijeron ‘saca los pasajes y ándate’. Los trámites son totalmente engorrosos. Te la hacen difícil, parece que les gusta”.