Los precios de los vinos aumentaron un 13,6% en agosto en comparación con el mes anterior, según el Índice de Precio del Vino (IPV) elaborado por Vinodata, un centro de investigación. Esto supera el aumento del 12,4% registrado en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) medido por el Indec.
El consumo de vino se ha visto afectado por estos aumentos de precios, y la cerveza se ha convertido en una competidora directa más atractiva para los consumidores. Si se proyecta el aumento de precios acumulado entre octubre y julio, el IPV podría registrar un aumento anualizado del 179% para el período de octubre de 2022 a septiembre de 2023. Los precios de las etiquetas de vino varían según su rango de precios, con aumentos que van desde el 10,4% para las etiquetas más económicas hasta el 18,5% para las de gama alta.
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En cuanto a las variedades de uvas, los vinos naranjos lideraron los aumentos en agosto, con un 22,3%, seguidos de los blancos y espumantes (15,1% y 15%, respectivamente), mientras que los vinos dulces experimentaron un aumento mucho menor, apenas un 2,9%. En la proyección anualizada, los vinos naranjos tendrían el mayor aumento, un 222,5%, mientras que los vinos dulces solo aumentarían un 98,6%.
La cerveza ha ganado participación de mercado, pasando del 42,3% al 45%, mientras que los aperitivos también han aumentado su cuota de mercado, pasando del 7,1% al 8,2% de las ventas totales en facturación. Esta tendencia refleja la preferencia de los consumidores por opciones más económicas en medio de la inflación en la industria del vino.
FUENTE: Ámbito