Portugal ha registrado 92 nuevos casos de coronavirus en las últimas 24 horas, el crecimiento diario más bajo desde que se declaró la pandemia en el país, informó el Ministerio de Salud, y el gobierno evalúa si permite que haya fieles presentes en el Santuario de Fátima el próximo 13 de mayo.
En total se tiene constancia de 1.043 muertes en todo el país tras confirmar 20 fallecidos más desde el balance del sábado, en un crecimiento del 2 por ciento, según el informe recogido por el diario Público, que cita Europa Press.
El incremento diario de casos es solo del 0,4 por ciento, según el análisis del Ministerio, que eleva el total aproximado de casos a 25.282 en todo el país.
Hay 856 personas hospitalizadas, de las cuales 144 están en cuidados intensivos, seis menos que el sábado, mientras que el número de altas hospitalarias asciende ya a 1.689, 18 más que el día anterior.
A pesar de las buenas cifras, el Ministerio de Salud persiste en el llamado a la cautela, dado que los contagios pueden volver al crecer.
Portugal dio por concluido ayer el estado de emergencia, por lo que a partir de hoy vuelve al estado de calamidad que el gobierno decretó al inicio de la pandemia, lo que implica una fase de relajación de medidas, durante la cual el primer ministro, António Costa, llamó a la población a no bajar la guardia.
«Los portugueses salvaron Portugal», subrayó el mandatario en una entrevista a la RTP en la que agradeció el compromiso ciudadano, a la vez que recordó que seguirá sin haber plena circulación.
El gobierno, de hecho, ha prorrogado hasta el 17 de mayo la prohibición al desembarco de pasajeros de cruceros.
En este contexto de desescalamiento de las medidas de seguridad, el gobierno evalúa rever la negativa inicial a permitir que se pueda participar de la ceremonia en el Santuario de Fátima del 13 de mayo, en un aniversario de las apariciones de la Virgen en ese lugar, según los devotos.
La cuestión ha asomado en las últimas horas, coincidiendo con el levantamiento del estado de emergencia, después de que la ministra de Salud, Marta Temido, admitiese que es una «posibilidad».
«Si ésa fuese la opción de quien organiza las celebraciones, de organizar una celebración del 13 de mayo donde puedan estar varias personas, siempre que sean respetadas las reglas sanitarias, eso es una posibilidad», sostuvo en entrevista con la cadena SIC, citada por EFE.
La ministra respondía así tras ser cuestionada por la celebración del Día del Trabajador en Lisboa, donde se reunieron 800 personas convocadas por la Confederación General de Trabajadores de Portugal (CGTP) con distancia de seguridad, aunque la imagen aérea de la reunión dejó lugar para la polémica.
Las posibilidad de abrir el festejo religioso sorprendió a la diócesis de Leiria-Fátima, que el pasado 6 de abril anunciaba que conmemoraría la fecha sin peregrinos por una cuestión de «gran sentido de responsabilidad» ante la pandemia y que ahora estudia si podrá recibir fieles en el templo.
Un portavoz de la diócesis admitió al diario Público que ante la sorpresa «estamos estudiando la situación, en el sentido de saber qué es posible (hacer)».