“Trabajamos un montón y por eso queremos agradecer a todos los que participaron”, dijo la referente provincial de esa red federal, Viviana Binder, a medios locales.
También agradeció al gobernador chubutense, Mariano Arcioni, «que se interesó desde el primer momento» en esa iniciativa, pues marca «un antes y un después ya que dará herramientas a los municipios que adhieran para poder tratar con seriedad la superpoblación de perros y gatos”.
«Por primera vez se trata con seriedad la temática”, por lo que «estamos realmente contentos”, afirmó.
Binder destacó que Chubut es pionero en el país con esta norma, que «descarta la eutanasia como método de control poblacional canino y eso es excelente. Por otro lado se toma las riendas e implementa la castración masiva”, ponderó, pues eso proporciona «resultados concretos».
Ahora, dijo, esperan que «todos los municipios adhieran” y que haya «un efecto dominó en el resto de las provincias” argentinas.
“Estamos hablando de un bien no sólo para los animales sino para el conjunto de la comunidad. Bajar el número de perros y gatos reduce el maltrato, los accidentes de tránsito, enfermedades y problemas de tipo ambiental», entre otros beneficios, explicó.