La directora de la Escuela de Nivel Primario Nº 165 de Trelew, Paula Rodríguez, dialogó con Radio 3 y expuso el panorama con el que se encuentra el establecimiento frente al comienzo de las clases la semana próxima.
En septiembre de 2022 sufrieron la explosión de la caldera y desde entonces a la fecha no han concluido los trabajos de recambio del equipo. “La calefacción nueva no llegó, tenemos obra y empresa pero falta la colocación del equipo y nos den la habilitación de Camuzzi”, repasó.
“Lo que sabemos es que fue comprando en el país pero se está esperando que llegue a la zona”, repasó y confirmó que “no tenemos plazo de finalización de obra”.
Actualmente “nos prestan aulas y compartimos horarios con los alumnos de las otras escuelas, la especial 529 y la primaria 164”, detalló y puntualizó que poseen una matrícula de 136 alumnos.
En esta línea, la Directora informó que “necesitamos levantar la matrícula, buscando que se elija la escuela del barrio, que las familias confíen en nuestra propuesta educativa. La idea es que se animen a conocer nuestras propuesta y lo que ofrecemos a los alumnos, que es mucho”.
En este contexto, la Directora repasó que la escuela intenta implementar desde el año pasado la “jornada completa” pero no han podido implementar esta metodología plenamente debido a las dificultades para poder brindar el servicio de comedor a los alumnos.
En este momento “no podemos brindar el comedor porque no tenemos el espacio y si lo tuviéramos no lo podemos brindar a la totalidad de los alumnos”, recordando que cuando aún estaban en el edificio propio “estábamos haciendo horario reducido”.
“Como cualquier nene de Trelew, necesitan el comedor -pero para brindarlo- necesitamos las mesas, las sillas”, explicó. Repasó que el año pasado “teníamos un plan de contingencia, un comedor rotativo. Cada día comía un grado diferente, que es el que hacia su jornada completa”.
Fue frente ante esto que valoró el acompañamiento de la comunidad educativa al establecimiento, “la comunidad y los papás que tenemos son nuestra gran fortaleza. Sentimos el apoyo que necesitábamos”.
Valoró y agradeció que “no nos están dejando solos y confían en la escuela, saben que no estamos en nuestro edificio pero la escuela 165 está. Queremos estar en nuestra casa, nuestro edificio, pero el espíritu está”, sentenció y remarcó que esto “es gracias a los papás, los docentes y los porteros que no se bajan de este barco”.
