En cinco años, más de 100 futbolistas de Primera División sufrieron esta lesión. Solo en 2024, se rompieron los ligamentos 39 jugadores. ¿Qué está pasando con el fútbol argentino?
El fútbol argentino enfrenta una problemática tan silenciosa como preocupante: desde finales de 2020 hasta hoy, 105 jugadores de la Liga Profesional sufrieron rotura de ligamentos cruzados, una de las lesiones más temidas por los deportistas. El dato más alarmante es que 39 de esos casos ocurrieron en 2024, lo que marca un récord histórico que encendió las alarmas entre médicos, técnicos y dirigentes.
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Aunque algunas instituciones parecen más golpeadas que otras —Banfield, Gimnasia y Rosario Central encabezan el listado con ocho casos cada una—, el problema no distingue escudos. Sarmiento, River, Godoy Cruz y Newell’s también figuran entre los más afectados, demostrando que esta epidemia atraviesa a toda la liga por igual. Las roturas no responden a un patrón único y afectan por igual a titulares, suplentes, figuras y juveniles.
Especialistas en medicina deportiva apuntan a varios factores que podrían estar detrás del incremento: calendarios sobrecargados tras la pandemia, escaso tiempo de recuperación entre partidos, campos de juego en mal estado y hasta la elección inadecuada del tipo de botines. A esto se suma el estrés mental que atraviesan los jugadores, presionados por clasificaciones, descensos y contratos.
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Jorge Batista, uno de los médicos más reconocidos del país, publicó un mensaje en redes sociales en el que advirtió que esta situación no tiene una salida rápida. «Se seguirán rompiendo cada vez más jugadores, esto es INEVITABLE», escribió. Afirmó que no hay programas de prevención efectivos porque «las variables a corregir tocan intereses económicos», y señaló que en Europa se cuida más al jugador, algo que aquí aún está lejos de implementarse.
La rotura de ligamentos implica entre seis y nueve meses de inactividad. Para el jugador, puede marcar un antes y un después en su carrera. Para los clubes, es un golpe deportivo y económico difícil de absorber. Ante la falta de un plan integral, las estadísticas continúan subiendo y, mientras tanto, el fútbol argentino se llena de muletas y rehabilitaciones, con más incertidumbres que soluciones.
Fuente: Noticias Argentinas
Foto: TyC Sports.