Los jefes comunales de Trevelin, Héctor Ingram, y de Esquel, Sergio Ongaratto, fueron los más literales en el rechazo. “Es necesario que el Gobierno de marcha atrás con una ley que nos duele a todos", aseveró Ingram. En tanto, el intendente de Trelew, Adrián Maderna, expresó su enfático repudio a los hechos de violencia, pero aclaró que "esas minorías violentas no representan ni quitan mérito a los miles de chubutenses que de forma pacífica se manifiestan con dolor y preocupación por el futuro de la provincia”.
Tras el fuerte rechazo social, el radical Rodolfo Suárez anunció la derogación de la ley 9.209 que permitía el uso de sustancias químicas como el cianuro para la explotación minera, y que modificaba la antigua ley 7.722.
Además del Gobernador y el líder del Frente Renovador, participaron otros dirigentes nacionales del Frente de Todos, diferentes referentes políticos de la provincia, intendentes y diputados provinciales.
“Es importante entender desde todos los sectores, tanto desde el sindicalismo como la dirigencia política, la obligación moral de tener la paz social, porque si le va mal a Provincia también se ven afectadas las ciudades”, sostuvo el Gobernador.
El intendente Adrián Maderna se refirió al déficit habitacional de Trelew y aseguró que “se están reactivando los planes de viviendas de menor a mayor, pero Nación nos ha dejado solos”.