La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, calificó la participación de Zelenski como "repugnante" y "cínica", destacando que el líder ucraniano promueve la glorificación de figuras vinculadas al nazismo dentro de su ejército.
Moscú denuncia esta exclusión como un intento de reescribir la historia y minimizar el papel del Ejército Rojo, que liberó el campo el 27 de enero de 1945.
Según Kiev, el bombardeo alcanzó infraestructuras energéticas clave en el oeste del país, justo un día después de que Ucrania ejecutara un ataque contra fábricas y centros energéticos en territorio ruso.
Donald Tusk, primer ministro polaco, solicita a la UE adoptar una postura más firme en seguridad y una política migratoria restrictiva para contrarrestar la influencia de Rusia y Bielorrusia.