Un tribunal de Corea del Sur emitió una orden de arresto contra Yoon Suk-yeol, presidente suspendido de sus funciones tras ser acusado de insurrección. La moción de destitución fue aprobada por la Asamblea Nacional, pero aún debe ser ratificada por el Tribunal Constitucional antes de junio de 2025. Este caso marca la primera vez que un presidente en funciones enfrenta una orden de arresto en el país.
El mandatario de 64 años, conocido por su carrera como fiscal, es señalado por declarar una ley marcial y autorizar acciones militares contra la Asamblea Nacional en diciembre de 2024. Según un informe de los investigadores, Yoon habría permitido el uso de la fuerza militar para implementar la ley, lo que desató una crisis política y protestas masivas en las calles.
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Pese a las citaciones judiciales, Yoon ha desatendido tres llamados para declarar. Esto llevó a los investigadores a solicitar una orden de arresto, que fue emitida después de un prolongado debate entre los magistrados. Sin embargo, su ejecución enfrenta obstáculos, ya que el equipo de seguridad del presidente ha impedido el registro de las dependencias presidenciales en múltiples ocasiones.
El abogado de Yoon calificó el informe judicial como un «relato parcial» y señaló que no refleja las circunstancias reales ni el sentido común. Mientras tanto, la policía ha reforzado la seguridad en la residencia del presidente en Seúl, donde se han registrado enfrentamientos entre sus detractores y partidarios.
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Medios locales consideran poco probable un arresto inmediato y sugieren que los investigadores coordinarán con los servicios de seguridad del presidente para proceder. Cualquier persona que obstruya la ejecución de la orden podría enfrentar sanciones legales.
Fuente:DW.
Imagen: Ahn Young-joon/AP Photo/picture alliance.