Una serie de tormentas y tornados devastadores han golpeado el este de Estados Unidos, dejando a su paso una estela de destrucción. En un suburbio de Detroit, Michigan, un niño perdió la vida debido al impacto de uno de estos tornados. En Maryland, cinco personas resultaron heridas el miércoles, mientras que ocho más sufrieron lesiones en Ohio durante la mañana del jueves.
En el poblado de Frazeysburg, al este de Ohio, un presunto tornado arrancó el dosel de una gasolinera y causó graves daños en un restaurante y una tienda de descuentos. Ocho personas sufrieron heridas menores, principalmente a causa de los escombros arrastrados por el viento, según informó Jeff Jadwin, director de manejo de emergencias del condado de Muskingum.
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La tormenta barrió la calle principal del poblado, dejando árboles caídos y casas dañadas a su paso. Se estima que al menos 100 viviendas resultaron afectadas, algunas de ellas completamente destruidas. Frazeysburg, con una población de 1,500 habitantes, se encuentra a unos 80 kilómetros al este de Columbus.
Por otro lado, en Livonia, Michigan, el tornado golpeó varios vecindarios el miércoles por la tarde, atrapando a los residentes desprevenidos. La formación del tornado fue tan repentina que no se emitieron advertencias por parte del Servicio Meteorológico Nacional u otras agencias, lo que habría activado las sirenas de alerta temprana.
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Las autoridades locales están evaluando los daños y brindando asistencia a las comunidades afectadas mientras trabajan para restablecer la normalidad en medio de la devastación causada por estas tormentas.
Fuente y foto: Associated Press