Un tribunal estadounidense ordenó hoy al exanalista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA), Edward Snowden, a entregar al Gobierno estadounidense los 4,2 millones de dólares obtenidos por la venta de su libro «Vigilancia Permanente», porque no presentó el manuscrito para que el Gobierno lo revisara antes de publicarlo.
El juez del estado de Virginia Liam O’Grady indicó, además, que Snowden debe entregar las ganancias obtenidas de los discursos y presentaciones realizadas con motivo de la publicación del libro, así como de cualquier tipo de adaptación que se realice.
Las autoridades dijeron que Snowden, quien publicó su libro de memorias «Vigilancia Permanente» en septiembre de 2019, estaba obligado a enviar el manuscrito de su libro para su revisión bajo acuerdos de secreto que firmó con la Agencia de Seguridad Nacional y la Agencia Central de Inteligencia.
En coincidencia con esa evaluación, el juez O’Grady detalló en su veredicto que el exanalista «violó sus obligaciones contractuales y fiduciarias con la CIA y la NSA al publicar el Registro Permanente y dar comentarios preparados dentro del alcance de sus obligaciones de revisión previa a la publicación», citado por la agencia de noticias Bloomberg.
Si bien el equipo legal de Snowden no respondió públicamente, en los documentos judiciales manifestó que la interpretación del Gobierno de los acuerdos de secreto firmado por las partes es «demasiado amplia» y «requeriría que los exservidores públicos envíen para revisión cualquier cosa relacionada con inteligencia durante el resto de sus vidas».
El juez O’Grady había dictaminado en diciembre de 2019, unos meses después de la publicación de «Registro permanente», que había violado sus contratos de confidencialidad, lo que puso en marcha demandas estadounidenses de pruebas sobre cuánto dinero había ganado con los discursos.
Snowden, que ahora vive en o cerca de Moscú, ignoró las solicitudes de información enviadas por el Gobierno, pero Estados Unidos pudo obtener algunas evidencias emitiendo citaciones a la Oficina del Programa Estadounidense, que ayudó al exanalista a organizar al menos 67 conferencias.
Se estima que ganó 4,2 millones de dólares por la venta del libro y otros 1,03 millones de dólares por sus conferencias.