Así lo indicó a Radio 3 el Secretario Social del IPV (Instituto Provincial de la Vivienda), Jorge Etchepareborda, respecto a la situación de los barrios entregados y los ocupantes.
Días atrás se había recordar que la venta de viviendas sin haber sido canceladas y sin la aprobación del IPV no está permitida.
IPV recordó que las viviendas no se pueden vender si no están canceladas
En este sentido, Etchepareborda confirmó que a semana que viene se comenzarán a realizar relevamientos en los barrios de Trelew y Rawson para determinar si las personas que viven en las viviendas son efectivamente los adjudicatarios y detectas situaciones irregulares de venta.
“Cada vivienda social adjudicada tiene una hipoteca de por medio –y- el principio fundamental es el deber de ocupación”, señaló el funcionario al remarcar que “por eso, vamos a comenzar un relevamiento completo de los barrios para verificar el estado de las viviendas, quienes las ocupan y notificar sobre moras si las hubiera”.
Las tareas comenzarán en Rawson y Trelew, mientras que “sin perjuicio de esos relevamientos, desde el Área Social y de Cobranza se notifica a las personas para que cumplan con el pago de cuotas”.
El secretario recordó que “tramos de advertir y generar los mejores consejos para las personas que están inscriptas y que tiene la esperanza que el Estado los pueda alcanzar”.
Es por ello que “el concejo que damos es, ante muchos reclamos y denuncias, que solo una vivienda que esta totalmente cancelada puede ser vendida”.
“Hacemos procedimientos para constatar los casos denunciados, hacemos una imagen del manejo de las viviendas posteriormente a haberlas recibido –porque- queremos que todos aquellos que son encantados ante la posibilidad de una adquisición de particular a particular, siempre consulten al Instituto”.
Reiteró así que “todas aquellas viviendas que están en situación de cobro son pertenecientes al IPV o están trabadas por una hipoteca. Entregar valor por una vivienda no implica desentenderse de la deuda que pudiese tener la vivienda”, sentenció.
De esta forma, dio cuenta que mediante las diferentes tareas “hemos podido evitar estafas –pero- vemos que esto sucede y no lo podemos controlar. El IPV intervine sobre los inmuebles y tratamos de aplicar las medidas correctivas según la normativa”.
Finalmente, aclaró que el IPV “no se delga, no tiene facilitadores de vivienda y no reconoce intermediarios. Advertimos que si alguien promueve o vende viviendas, que primer consulte al IPV”, concluyó.