Las mujeres dominaron con contundencia la segunda edición de los Premios de la Academia de la Música de España.
Amaia, Rozalén, Nathy Peluso y Valeria Castro fueron las artistas más reconocidas de la noche en el Palacio Municipal IFEMA de Madrid, destacándose no solo por su talento sino también por la emotividad de sus discursos y su firme compromiso social. La gala no solo fue una celebración musical, sino también una tribuna para pedir una “Palestina libre” y visibilizar desigualdades en el sector.
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Rozalén, visiblemente emocionada, se alzó con el galardón más codiciado, el de «mejor artista». En lágrimas, reconoció lo difícil que resulta muchas veces que se valore el esfuerzo detrás del arte femenino. Por su parte, Amaia arrasó con tres premios por su canción “Tengo un pensamiento”, incluyendo “mejor canción del año”, “mejor canción pop” y “mejor arreglo”. “Salió desde un lugar muy íntimo y me emociona que haya llegado a tanta gente”, afirmó la pamplonesa.
Nathy Peluso también tuvo una noche redonda, ganando en las cuatro categorías en las que estaba nominada, todas relacionadas con la música urbana. Su disco Grasa fue reconocido como el mejor del género, y temas como Manhattan y Aprender a amar confirmaron su versatilidad y poderío. Valeria Castro no se quedó atrás: con premios por mejor canción de banda sonora, de cantautor y electrónica, fue otra de las grandes triunfadoras.
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La presidenta de la Academia, Sole Giménez, recordó durante su discurso que solo el 30% de quienes trabajan en la música en España son mujeres, y llamó a “seguir con el compromiso firme de darles más voz”. En una industria históricamente dominada por hombres, estos premios marcaron un punto de inflexión con fuerte presencia femenina tanto en los escenarios como en las premiaciones.
Si bien artistas masculinos también fueron galardonados —como Dani Fernández, Leiva, Estopa y C. Tangana—, fue el protagonismo femenino el que marcó el pulso de una gala que conjugó música, emoción, política y reivindicación. Desde los discursos hasta las canciones, las artistas pusieron sobre la mesa las emociones, los desafíos y las luchas que aún enfrenta la industria musical.
Fuente: EFE.