El Gobierno argentino pidió este viernes “la inmediata liberación del gendarme Nahuel Gallo”, detenido en Venezuela, y extendió el reclamo a “todos los connacionales que se encuentren ilegalmente privados de su libertad por dicho régimen”. Así lo expresó la Cancillería en un comunicado en el que también manifestó su “profunda preocupación por la detención arbitraria de ciudadanos argentinos” en ese país.
La cartera dirigida por Gerardo Werthein condenó “el proceso sistemático de detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas y violaciones generalizadas de los derechos humanos” en Venezuela. Además, adelantó que profundizará las denuncias penales internacionales contra el funcionario chavista Diosdado Cabello, a quien acusa de liderar una estructura represiva.
“Diosdado Cabello lidera una maquinaria represiva que se apoya en el miedo, el secuestro de inocentes, la desaparición forzada y el hostigamiento sistemático a los entornos familiares de los perseguidos”, afirmó la Cancillería. Y remarcó que “todo ello se ha ejercido desde el poder del Estado, con amparo institucional y complicidad de las estructuras de seguridad, inteligencia y justicia”.
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El Gobierno argentino advirtió que las víctimas no son sólo nacionales, sino también ciudadanos de otras nacionalidades que han sufrido “violaciones graves”. Según el comunicado oficial, “se trata de un patrón de represión que puede ser calificado como terrorismo de Estado, por su carácter sistemático, intimidatorio y arbitrario”.
Finalmente, el comunicado cerró con un mensaje enfático: “Se continuará impulsando todas las acciones necesarias para asegurar que estos crímenes no queden impunes y que todos sus responsables —materiales e intelectuales— enfrenten la justicia internacional con todo el peso de la ley”.
Con información de NA.