Las fiestas de fin de año pueden alterar tu ritmo circadiano. Aquí te contamos cómo prevenir el jet lag social durante las celebraciones.
Durante las fiestas de diciembre, las reuniones sociales y eventos alteran nuestros horarios habituales de sueño, provocando un desfase similar al jet lag que experimentamos al viajar a diferentes husos horarios. Este fenómeno, denominado jet lag social, tiene efectos sobre el sueño y la salud, y afecta a muchas personas durante las fiestas.
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El jet lag social ocurre cuando cambiamos nuestros horarios de descanso, lo que impacta directamente en el ritmo circadiano, el ciclo natural de sueño y vigilia que regula nuestros procesos físicos y mentales. Según los expertos Stella Maris Valiensi y Agustín Folgueira, esta alteración no es una enfermedad, sino una consecuencia de los cambios en las rutinas sociales, como las fiestas, las cenas tardías y la acumulación de actividades sociales.
En este contexto, el ritmo habitual del sueño se ve desplazado. A diferencia de los días laborables, donde el despertador nos obliga a levantarnos temprano, los fines de semana y días festivos tendemos a dormir más, lo que genera una diferencia en la calidad y cantidad de descanso, provocando los efectos del jet lag social.
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Para prevenir estos efectos, los expertos sugieren establecer horarios de sueño regulares incluso durante las fiestas. Intentar mantener una rutina de descanso similar a la habitual puede minimizar los efectos negativos de las alteraciones del sueño. Asimismo, evitar el consumo excesivo de alimentos y bebidas estimulantes, como el alcohol o la cafeína, puede ayudar a mejorar la calidad del sueño.
Fuente: Infobae
Foto: LA NACIÓN