Un nuevo ataque con drones kamikaze lanzado por Rusia causó la muerte de al menos nueve personas y dejó al menos 30 heridos en la ciudad ucraniana de Marganets, en la región de Dnipropetrovsk. El ataque impactó directamente sobre un vehículo que transportaba trabajadores de una empresa local.
“El ataque enemigo se cobró la vida de nueve personas”, confirmó el gobernador regional Sergii Lisak a través de Telegram, y añadió que “el número de heridos no cesa de aumentar” tras el bombardeo ocurrido en la madrugada del miércoles.
Además de la tragedia en Marganets, las autoridades ucranianas informaron sobre múltiples incendios provocados por otros ataques en las regiones de Kiev, Járkov, Poltava y Odesa, como parte de una ofensiva aérea más amplia.
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La Fuerza Aérea de Ucrania detalló que Rusia lanzó un total de 134 drones durante la noche, incluidos drones explosivos y réplicas sin carga que buscan confundir a los sistemas de defensa aérea.
Este incremento de los ataques coincide con una reunión clave que se celebrará en Londres entre representantes de Ucrania, Estados Unidos y varios países europeos para discutir posibles vías para poner fin al conflicto.
Mientras tanto, las autoridades ucranianas siguen trabajando en la identificación de las víctimas y en la asistencia a los heridos, en un contexto de creciente tensión y violencia que afecta a la población civil.
Fuente: DW.