Corea del Norte realizó ejercicios de disparo de artillería de defensa, en su más reciente prueba de armas mientras continúa pidiendo que Estados Unidos y Corea del Sur abandonen su “política hostil”, informó hoy la prensa estatal del país.
Ayer se concretó una competencia de tiro de artillería, con la presencia de altos funcionarios gubernamentales y militares pero sin el líder norcoreano Kim Jong Un, informó la agencia de noticias estatal norcoreana KCNA.
Desde septiembre, Corea del Norte probó una serie de misiles recientemente desarrollados, incluyendo proyectiles con capacidad nuclear con los que podría alcanzar los territorios de Corea del Sur y Japón, dos aliados de Estados Unidos.
Las pruebas de artillería norcoreanas atraen menos la atención del exterior que sus pruebas de misiles, en particular los balísticos, que están prohibidos por múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Sin embargo, su artillería de largo alcance desplegada cerca de la frontera con Corea del Sur representa una amenaza para Seúl.
Funcionarios estadounidenses ofrecieron recientemente reiniciar conversaciones con Corea del Norte, pero su Gobierno dijo que no volverá al diálogo a menos que Estados Unidos abandone su “política hostil”, una aparente referencia a las sanciones y los ejercicios militares regulares que realizan Washington y Seúl.
Las conversaciones dirigidas por la Casa Blanca destinadas a poner fin al programa nuclear de Corea del Norte colapsaron a principios de 2019 tras un fallido encuentro en Vietnam debido a diferencias sobre el levantamiento de sanciones y lo que Corea del Norte ofrecería a cambio.
Kim se reunió tres veces con el exmandatario estadounidense Donald Trump, quien aseguró haber impedido una guerra pero no alcanzó un acuerdo para terminar con el programa nuclear norcoreano.
Pese al estancamiento de las negociaciones, el actual presidente estadounidense, Joe Biden, prometió buscar la desnuclearización mediante la diplomacia, sin obtener ningún resultado hasta el momento.