La crisis energética en la isla se agrava con fallas en las centrales termoeléctricas y escasez de combustible. Algunas regiones solo tienen electricidad cuatro horas al día.
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Cuba sufrirá este sábado una nueva jornada de apagones masivos, con un déficit eléctrico que afectará hasta el 41 % del territorio de manera simultánea, según informó la estatal Unión Eléctrica (UNE). La entidad atribuye la crisis a averías en centrales termoeléctricas y a la falta de combustible, dos problemas que han llevado al país a niveles críticos de desabastecimiento eléctrico.
La crisis energética, que ha empeorado en los últimos meses, ha provocado cortes nacionales de varios días y déficits de hasta el 53 %. En algunas provincias, los ciudadanos solo cuentan con cuatro horas diarias de electricidad, mientras que en La Habana los cortes llegan a cinco horas por jornada.
El sistema eléctrico cubano se encuentra obsoleto, con termoeléctricas deterioradas por décadas de explotación y escasa inversión. Además, la paralización de otras infraestructuras responde a la falta de fueloil y diésel, ya que el Estado carece de divisas suficientes para importarlos. Según cálculos independientes, el Gobierno cubano necesitaría entre 8.000 y 10.000 millones de dólares para recuperar el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), una inversión que parece fuera de su alcance.
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El impacto de los apagones en la economía es grave: en 2023, el PIB de Cuba cayó un 1,9 % y no creció en 2024, según datos oficiales. Para 2025, el Gobierno prevé un leve avance del 1 %, aunque el país seguirá por debajo de los niveles de 2019.
Más allá del impacto económico, los cortes de luz han avivado el descontento social, incentivando la migración masiva y motivando inusuales protestas desde 2021, en un país donde las manifestaciones públicas son poco frecuentes.
Fuente: EFE
Foto: Archivo