Firmada el 9 de julio de 1816, el Acta de la Independencia de las Provincias Unidas en Sud América se redactó en español, quechua, aymará y guaraní, reflejando la diversidad cultural del ex Virreinato del Río de la Plata.
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El Acta de la Independencia argentina es un documento fundamental en la historia del país, formalizando la independencia de las Provincias Unidas en Sud América. Firmada el 9 de julio de 1816 en el Congreso de Tucumán, su redacción multilingüe refleja la rica diversidad cultural de la región en esa época.
El ex Virreinato del Río de la Plata, que incluía territorios que hoy forman parte de Paraguay, Uruguay, Bolivia, Perú y Brasil, albergaba una población mayoritariamente mestiza, con un importante porcentaje de ascendencia quechua y aymará. Esta diversidad étnica y cultural influyó en la decisión de redactar el Acta de la Independencia en cuatro idiomas: español, quechua, aymará y guaraní.
La inclusión de estos idiomas no solo reconocía la pluralidad lingüística de las Provincias Unidas, sino que también era una manera de comunicar la independencia a las comunidades originarias que apoyaron la causa patriota. Las guerrillas de estas comunidades lucharon junto al ejército patriota, y era esencial que comprendieran plenamente la trascendencia de la declaración de independencia.
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Entre 1,000 y 1,500 copias del Acta original fueron impresas en cada uno de los cuatro idiomas. Las versiones en quechua y aymará se distribuyeron principalmente en las provincias del noroeste, mientras que las versiones en guaraní se enviaron a las provincias del litoral.
El Congreso de Tucumán, que comenzó sus sesiones el 24 de marzo de 1816, estuvo conformado por 29 diputados firmantes que representaban a todas las provincias, exceptuando las del litoral. Estas últimas, encabezadas por José Gervasio Artigas, se oponían al gobierno central y no enviaron representantes al Congreso.
De los cinco diputados ausentes, dos estaban combatiendo en el ejército, uno estaba detenido y dos estaban en misiones diplomáticas. A pesar de estas ausencias, el Congreso logró redactar y firmar un documento que no solo proclamaba la independencia, sino que también respetaba y celebraba la diversidad cultural de la región.
Fuente y foto: Billiken