El escenario del acto se montó frente al Monumento de la Bandera, en Rosario; donde estuvieron presente los precandidatos a presidente y vice, Alberto Fernández y Cristina Kirchner; acompañado por gobernadores (en ejercicio o electos) y precandidatos del Frente de Todos.
En su discurso, la senadora Cristina Fernández dijo que el momento en que el Gobierno contrajo la nueva deuda con el FMI “fue el verdadero punto de inflexión” para concretar la unidad del peronismo.

En ese momento “pensamos Alberto (Fernández), Sergio (Massa) y otros dirigentes que era necesario unir las fuerzas nacionales para a partir de allí encarar una tarea que va a ser muy difícil”, aseguró.
La expresidenta pidió trabajar por la gente común porque “ningún dirigente político duerme en la calle, ningún dirigente político se queda sin trabajo, ni come una vez al día o salteado”.
Tras los aplausos de los presentes, la precandidata a vicepresidenta aseguró que “gracias a los gobernadores la Argentina que se viene va a ser distinta” y afirmó que los mandatarios provinciales “van a ser parte de esa Argentina que se viene”.

Por su parte, Alberto Fernández cuestionó las políticas socio-económicas del Gobierno actual por la cantidad de excluidos y aseguró que el peronismo “nació para defender a esa gente, para darle dignidad a los que quedaron al margen”.
Fernández propuso “construir una Argentina Federal, una Argentina que de una vez por todas deje de reclamar su condición de federal y empiece a construirla”.
“Quiere decir que empecemos a pensar la Argentina desde el interior del país y no siempre desde mi querida ciudad de Buenos Aires”, enfatizó.

“Hay momentos en la política que necesitan otras cosas. Están todos muy preocupados por cómo me voy a llevar con Cristina, nunca más me voy a pelear con ella”, sentenció Fernández.

Fuente: Télam