El Feyenoord sufrió una dura derrota por 0-2 ante el Ajax en un emocionante Clásico que dejó al equipo de Brian Priske a una vez puntos del liderato en la Eredivisie.
Este partido, aplazado por una huelga de Policía, se presentó como una oportunidad clave para ambos equipos en la lucha por el título, pero la victoria del Ajax ha reafirmado su candidatura al campeonato.
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Desde el inicio del encuentro, el Ajax mostró su intención de dominar, y con un equipo renovado bajo la dirección de Farioli, la escuadra de Ámsterdam se posiciona como un serio contendiente. Farioli, que ha conseguido revertir la crisis del Ajax, se sorprendió al alinear a Chuba Akpom como extremo derecho, una decisión que funcionó a la perfección. Su equipo se mostró sólido y aprovechó al máximo los errores del portero Wellenreuther del Feyenoord.
Los goles llegaron en la primera mitad, ambos a causa de fallos defensivos del Feyenoord. El primero fue una fácil definición de Taylor, quien, tras un largo despeje de Pasveer, superó al portero rival que había salido de su área. El segundo tanto llegó en el minuto 25, cuando Hato capitalizó un balón suelto en un córner que parecía inofensivo, dejando al Feyenoord en una posición muy comprometida.
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A pesar de los esfuerzos de los locales por reaccionar, el Feyenoord apenas generó ocasiones claras. La frustración del entrenador Priske fue evidente, especialmente al sustituir al delantero Ueda en el minuto 40, lo que dejó al jugador visiblemente afectado. Su sustituto, Carranza, no logró marcar la diferencia, y las pocas llegadas al área rival, como un potente tiro libre de Hwang, no inquietaron a Pasveer.
Con esta victoria, el Ajax se coloca a solo cinco puntos del PSV, actual líder de la liga, mientras que el Feyenoord deberá replantearse su estrategia para recuperar terreno en el campeonato. La situación del equipo de Priske se vuelve cada vez más crítica, y las dudas sobre su continuidad en el cargo comienzan a florecer tras una nueva derrota en un encuentro crucial.
Fuente: Diario AS
