Un incendio en una subestación eléctrica provocó el cierre de Heathrow durante casi 18 horas, afectando a cientos de vuelos y dejando miles de pasajeros varados. Las aerolíneas advierten que las consecuencias se sentirán por varios días.
El Aeropuerto de Heathrow, el más concurrido de Europa, reabrió el sábado tras casi 18 horas de cierre debido a un incendio en una subestación eléctrica que afectó gravemente las operaciones aéreas. Más de 1.300 vuelos fueron cancelados, y alrededor de 200.000 personas quedaron varadas el viernes cuando el fuego interrumpió el suministro eléctrico del aeropuerto, ubicado a 3,2 kilómetros de la subestación incendiada. La causa del incendio aún se investiga, aunque la policía no considera que haya sido un acto sospechoso.
MIRÁ TAMBIÉN | Mueren dos bomberos en incendios forestales en Corea del Sur
El fuego, que comenzó durante la noche, desató una serie de explosiones y dejó a residentes en el oeste de Londres alarmados por la enorme bola de fuego visible desde varias zonas. El aeropuerto, aunque «totalmente operativo» ahora, enfrenta consecuencias a largo plazo, ya que se necesitarán varios días para reubicar aviones y tripulaciones. British Airways, la principal aerolínea del aeropuerto, espera operar un 85% de sus vuelos el sábado, pero los pasajeros deben confirmar el estado de sus vuelos con las aerolíneas.
El incendio afectó a una subestación de electricidad cercana, provocando cortes en el suministro que afectaron también a más de 60.000 hogares. El fuego fue finalmente controlado tras siete horas de intenso trabajo de los bomberos, pero la paralización del aeropuerto fue casi total. En total, más de 120 vuelos que ya se encontraban en el aire fueron desviados a otras ciudades y países debido al cierre de Heathrow.
MIRÁ TAMBIÉN | Alemania cierra su embajada en Sudán del Sur por la violencia
La crisis ha generado fuertes críticas sobre la infraestructura de transporte británica, que algunas consideran insuficientes para afrontar desastres de esta magnitud. Heathrow, que recibe anualmente millones de pasajeros, ha tenido que adaptar su operación con la incorporación de más vuelos y personal para poder reubicar a los pasajeros afectados y reducir los retrasos.
Este incidente se suma a una lista de interrupciones graves en la aviación europea, recordando a los viajeros los desafíos que enfrenta el sistema de transporte global, similar al caos ocasionado por la erupción del volcán Eyjafjallajokull en 2010.
Fuente: AP.
Foto: Kirsty Wigglesworth – AP.