En Bélgica, la agencia federal para la seguridad de la cadena alimentaria emitió una advertencia inusual: «No coman su árbol de Navidad». Este mensaje surgió después de que el municipio de Gante publicara consejos para reciclar las coníferas, citando prácticas escandinavas como el uso de agujas secas para preparar mantequilla.
La agencia explicó que los árboles de Navidad no son aptos para el consumo humano ni animal debido a la posible presencia de pesticidas y retardantes de llama utilizados en su cultivo. «El consumo de estos árboles podría tener consecuencias graves, incluso mortales», subrayaron en un comunicado.
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En respuesta, el municipio de Gante modificó su publicación, cambiando el titular original «Cómanse su árbol de Navidad» por «Los escandinavos se comen sus árboles de Navidad», ajustando su mensaje tras la advertencia de las autoridades.
Esta peculiar controversia subraya la importancia de verificar la seguridad alimentaria, incluso cuando se trata de iniciativas ecológicas o innovadoras.
Fuente: RFI.
Imágen:Nicolas Tucat / AFP/Archivos.