El Ejército israelí intensifica sus operaciones en el sur del Líbano, reportando la muerte de 440 combatientes de Hezbolá y la destrucción de infraestructura subterránea clave en la región.
MIRÁ TAMBIÉN | Las fuerzas rusas avanzan en Donetsk y capturan la localidad de Zhelanne Drugue
El portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari, anunció que las fuerzas armadas de Israel han eliminado a aproximadamente 440 milicianos del grupo chií Hezbolá en una serie de incursiones que comenzaron la madrugada del pasado martes. «Estamos empujando a Hezbolá hacia el norte. Algunos terroristas han huido, mientras que otros están siendo derrotados por nuestras tropas en combates a corta distancia», afirmó Hagari en un mensaje de video.
Entre los milicianos muertos se encuentran alrededor de 30 comandantes, quienes perdieron la vida como resultado de la combinación de ataques aéreos y enfrentamientos en el terreno. Durante estas operaciones, las tropas de la 98ª División lograron destruir un túnel de aproximadamente 250 metros, ubicado a 300 metros de la frontera entre Líbano e Israel. El portavoz no especificó cuándo se llevaron a cabo las operaciones que llevaron a la identificación de esta infraestructura subterránea.
MIRÁ TAMBIÉN | El déficit comercial entre Argentina y Brasil fue negativo en septiembre
Dentro del túnel, las fuerzas israelíes encontraron «centros de control, equipamiento de combate y una amplia variedad de armas que las fuerzas Radwan de Hezbolá planeaban utilizar en una invasión a Israel». Además, se descubrieron instalaciones como duchas, una cocina y reservas de comida.
Desde hace más de diez días, Israel ha intensificado su campaña de bombardeos contra el Líbano, enfocándose principalmente en el sur, el valle de la Becá y las áreas periféricas de Beirut, incluyendo el centro de la capital en al menos dos ocasiones. Este aumento de hostilidades ha resultado en la muerte de más de 2.000 libaneses y el desplazamiento de 1,2 millones de personas debido a los bombardeos israelíes.
Fuente: DW
Foto: Archivo