«Italia no puede ser el punto de llegada de inmigrantes de todo el mundo», afirmó Salvini, durante una declaración en la que llamó a la Unión Europea (UE) a «moverse» y «despertar» para acudir en ayuda del país transalpino, informó la agencia de noticias local AdnKronos.
«Cada año enviamos miles de millones (de euros) a Bruselas» y «la defensa de las fronteras debe ser una prioridad europea», reclamó Salvini, que ya durante su primera etapa en el Ejecutivo impulsó un endurecimiento sin precedentes de la política migratoria, lo que generó cuestionamientos por parte de las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos, consignó la agencia Europa Press.
Salvini presumió de haber «ganado juicios» por aquella época, cuando promovió una doctrina de puertos cerrados que limitaba el margen de maniobra de las ONG que rescatan a migrantes y refugiados en aguas del Mediterráneo central.
MIRÁ TAMBIÉN | Rescatan a más de 400 migrantes en el mar Mediterráneo
En lo que va de año, más de 100.000 migrantes llegaron a las costas italianas, según datos del Ministerio del Interior.
Télam