La vicepresidenta demócrata puso al exmandatario republicano a la defensiva, abordando temas cruciales como el racismo, la guerra en Gaza y el aborto.
El debate presidencial celebrado este martes en Filadelfia fue testigo de un enfrentamiento encendido entre la vicepresidenta demócrata Kamala Harris y el exmandatario republicano Donald Trump. El intercambio, transmitido en vivo por ABC, se centró en temas candentes como el racismo, la migración, la guerra en Gaza y el ataque al Capitolio.
El debate comenzó con un apretón de manos entre Harris y Trump, pero pronto se convirtió en un escenario de tensiones. Harris no tardó en poner al exmandatario a la defensiva al criticar su gestión pasada. “Hemos limpiado el desastre de Trump”, afirmó la vicepresidenta, destacando los problemas de desempleo y salud pública heredados de la administración republicana.
LEE TAMBIÉN | El Papa Francisco llega a Singapur en el tramo final de su gira
Sobre la guerra en Gaza, Harris insistió en la necesidad de un alto el fuego inmediato, mientras que Trump acusó a la candidata demócrata de ser una amenaza para Israel. “Ella odia a Israel. Si se convierte en presidenta, no creo que Israel exista en dos años”, dijo el exmandatario.
El debate también abordó el aborto, la idoneidad de Trump para el cargo y sus problemas legales. Trump, a menudo irascible, lanzó ataques personales y afirmaciones infundadas, mientras Harris se mantuvo calmada y con una actitud firme. En un momento, la vicepresidenta ridiculizó los mítines de Trump, mientras él defendía su popularidad con afirmaciones exageradas.
Harris acusó a Trump de ser el hazmerreír internacional y manipulable por líderes mundiales. “He hablado con líderes militares que trabajaron con usted y dicen que es una vergüenza”, comentó Harris, añadiendo que los dictadores desean que Trump vuelva al poder para manipularlo con halagos.
MIRÁ TAMBIÉN | Chile conmemora 51 años del golpe de Estado
El debate también tocó temas como la inmigración, la política exterior y la sanidad, aunque el enfoque principal fue la confrontación entre los dos candidatos.
En un movimiento que amplifica el apoyo a Harris, la superestrella del pop Taylor Swift anunció en Instagram que respaldará a Harris y a su compañero de fórmula Tim Walz en las elecciones de noviembre. Swift, con sus 283 millones de seguidores, destacó la calma y el compromiso de Harris, lo que generó una gran respuesta en las redes sociales.
El equipo de campaña de Harris, tras el debate, desafió a Trump a un segundo encuentro, señalando que la vicepresidenta está lista para continuar el enfrentamiento. “Harris está lista para un segundo debate. ¿Está listo Donald Trump?” declaró el comunicado de campaña.
Fuente: DW.
Foto: AP/John Locher.