Expertos advierten sobre fraudes telefónicos que usan la voz de las víctimas para suplantación de identidad. ¿Cómo evitar caer en la trampa?
MIRÁ TAMBIÉN | El módulo Athena cayó dentro de un cráter lunar
Responder una llamada de un número desconocido puede parecer inofensivo, pero se ha convertido en un riesgo creciente de fraude. Organizaciones de consumidores y entidades bancarias han alertado sobre una nueva modalidad delictiva que utiliza la grabación de la voz de las víctimas para autorizar transacciones y cometer suplantación de identidad.
Existen tres expresiones comunes que pueden ser aprovechadas por los estafadores al contestar una llamada: «sí», «hola» y «aló». Aunque parecen respuestas habituales, los delincuentes han desarrollado técnicas para manipularlas con fines fraudulentos.
MIRÁ TAMBIÉN | Según la UCA la pobreza creció de un 39,8 % al 41,6%
- «Sí»: Un simple «sí» puede ser grabado y utilizado para aprobar transacciones, solicitar préstamos o aceptar contratos sin el consentimiento real del usuario. Según el Banco de España, esta táctica es común en el vishing, un tipo de estafa telefónica en la que los delincuentes se hacen pasar por empleados de bancos para obtener grabaciones de voz y usarlas como supuesta prueba de autorización.
- «Hola»: Este saludo habitual puede ser el inicio de una trampa. Expertos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de España han advertido que los estafadores pueden manipular grabaciones de voz para engañar a bancos o empresas de crédito, simulando conversaciones falsas que permiten realizar operaciones ilícitas
- «Aló»: En países de habla hispana, esta palabra puede activar sistemas automatizados de telemarketing o fraude. Los delincuentes utilizan softwares que detectan respuestas humanas y seleccionan números activos, aumentando la probabilidad de recibir llamadas fraudulentas en el futuro.
MIRÁ TAMBIÉN | Shakira cerró su gira por Argentina con un show inolvidable
Dado el auge de estas prácticas fraudulentas, es fundamental adoptar precauciones al contestar llamadas desconocidas. Entre las recomendaciones de los expertos destacan:
- Evitar responder con «sí», «hola» o «aló». En su lugar, preguntar directamente “¿Quién habla?” o “¿Con quién desea comunicarse?”.
- No proporcionar información personal. Si el supuesto banco o empresa solicita datos, es mejor colgar y comunicarse directamente con la entidad a través de canales oficiales.
- No prolongar la conversación. Si la llamada parece sospechosa, lo mejor es terminarla de inmediato.
- Revisar regularmente movimientos bancarios y reportar cualquier actividad inusual.
- Bloquear y reportar números sospechosos a las autoridades o a la compañía telefónica.
Los fraudes telefónicos han evolucionado y cada vez son más sofisticados. La clave para no caer en la trampa es la prevención y el escepticismo ante llamadas inesperadas.
Fuente: Infobae
Foto: Archivo