En una entrevista por los 120 años del club, el ídolo y presidente Xeneize confesó lo que Boca significa en su vida y recordó su legado como jugador.
Hace 120 años nacía Boca Juniors, y uno de sus máximos ídolos, Juan Román Riquelme, lo celebró con una emotiva entrevista en El Canal de Boca. Durante la conversación, el actual presidente del club confesó su profundo amor por la institución: «Boca puede vivir sin mí, pero yo no sin Boca». Una frase que resuena con la pasión de millones de hinchas.
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Riquelme reveló que su fanatismo por Boca es una herencia de su padre. «No tuve muchas chances de elegir, mi papá me hizo de Boca y listo», comentó con una sonrisa. Aunque se formó en Argentinos Juniors, su corazón siempre estuvo en La Bombonera. Recordó con nostalgia los viajes desde Don Torcuato para ver al Xeneize, momentos que marcaron su infancia y su identidad futbolística.
Como jugador, Riquelme vivió momentos inolvidables en Boca. En sus dos etapas en el club, conquistó seis títulos locales y cinco internacionales, incluidas tres CONMEBOL Libertadores. Sin embargo, más allá de los trofeos, destacó lo que recibió de los hinchas: «El hincha me regaló mucho más de lo que yo le pude dar». Para él, Boca es más que un club: es un sentimiento que se lleva toda la vida.
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En su nuevo rol como presidente, Riquelme sigue demostrando su amor por Boca desde otro lugar. Aunque ya no pisa el césped, su influencia sigue siendo clave en la institución. «Es el lugar más lindo del mundo», afirmó, dejando en claro que su historia con el club sigue escribiéndose.
Con la misma pasión que lo caracterizó en el campo de juego, Riquelme reafirmó su compromiso eterno con Boca. «Mi vida es Boca, esa es la verdad», concluyó emocionado. Su legado sigue intacto y su vínculo con el club es irrompible.
Fuente: ESPN.