El Gobierno nacional, mediante la Resolución General 555/2024 de la AFIP, introdujo importantes cambios en las regulaciones que afectan a la cadena de comercialización de la yerba mate, con el objetivo de mejorar la operación y fomentar la competencia en el sector. La medida, publicada hoy en el Boletín Oficial, deroga un conjunto de normativas implementadas en 1998 que imponían estrictas obligaciones documentales para el traslado e industrialización de este cultivo esencial en la economía argentina.
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Entre los cambios más significativos, se destaca la eliminación de la obligatoriedad de emitir la «Hoja de ruta yerbatera», un comprobante que hasta ahora era necesario para el transporte y la industrialización de la yerba mate. Además, la resolución suprime la obligación de los molinos, secaderos y depósitos de registrar de manera obligatoria los ingresos, egresos y existencias de yerba mate en el «Libro de Movimientos y Existencias». Estas medidas buscan simplificar los procesos administrativos que históricamente fueron una carga para los productores y comercializadores del sector.
El comunicado oficial del Gobierno explica que esta reforma pretende «agilizar las gestiones necesarias para la actividad y así reducir costos innecesarios de los distintos eslabones que conforman esa cadena». En un contexto de creciente presión para mejorar la competitividad de los productos argentinos, tanto en el mercado interno como en el internacional, la reducción de trámites burocráticos se presenta como una estrategia clave para aliviar la carga sobre los pequeños y medianos productores, quienes muchas veces son los más afectados por la excesiva regulación.
La AFIP enmarcó esta resolución dentro de un esfuerzo más amplio para revisar y ajustar los diferentes registros, comprobantes, obligaciones y regímenes de información que fueron implementados en gestiones anteriores. Según el comunicado del organismo, la intención es identificar y eliminar aquellos elementos que «pudieran obstaculizar la agilización de los procesos, interferir en el comercio o incrementar los costos», permitiendo así una mayor eficiencia en la cadena productiva de la yerba mate.
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Estas modificaciones son recibidas con expectativa por parte de los productores, quienes ven en esta simplificación una oportunidad para mejorar su competitividad y reducir los costos asociados a la burocracia. A medida que se implementan estas nuevas normas, se espera que la industria de la yerba mate pueda operar con mayor agilidad, beneficiando tanto a productores como a consumidores.
Fuente: Noticias Argentinas.
Foto: Global Play.
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