El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, sorprende con una visita a las tropas en Rafah mientras las tensiones aumentan tras la controvertida visita del ministro de Seguridad Itamar Ben Gvir a la mezquita de Al Aqsa.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, llevó a cabo este jueves una visita sorpresa a las tropas desplegadas en el sur de la Franja de Gaza, en la ciudad de Rafah. La visita, que se realizó sin previo aviso, fue confirmada solo después de que Netanyahu abandonara el territorio. En su declaración, el primer ministro subrayó que «solo la presión militar nos ayudará a avanzar hacia un acuerdo sobre los rehenes».
MIRÁ TAMBIÉN | Murió una bebé en un desprendimiento de rocas
La inesperada visita de Netanyahu se produjo poco después de una polémica acción del ministro de Seguridad, Itamar Ben Gvir. Este ultraderechista ministro visitó el sagrado complejo de la mezquita de Al Aqsa en Jerusalén, donde rezó por el regreso de los rehenes, a la vez que expresó su oposición a cualquier acuerdo que considere imprudente o una rendición. Su visita podría complicar aún más las ya delicadas negociaciones para alcanzar un alto el fuego en el conflicto entre Israel y Hamás, que ha estado en curso durante los últimos nueve meses.
Mientras tanto, los negociadores israelíes llegaron el miércoles a El Cairo para continuar las conversaciones sobre el alto el fuego. La visita de Netanyahu a Gaza también se produce a pocos días de su viaje planeado a Estados Unidos, donde ofrecerá un discurso ante el Congreso. La influencia de Ben Gvir, conocido por sus posturas extremas y su historial controvertido, ha sido un factor en la presión por continuar la ofensiva en Gaza, desafiando las demandas internacionales de un acuerdo de paz.
MIRÁ TAMBIÉN | Servicio Secreto defendió a sus agentes femeninas tras acusaciones
El Ministerio palestino de Exteriores ha denunciado la visita de Ben Gvir como una «intrusión provocativa», que podría desestabilizar el ya frágil status quo en torno al recinto sagrado. Esta tensión se suma a la reciente aprobación por parte del parlamento israelí de una resolución que rechaza la formación de un estado palestino, avivando aún más los brotes de violencia en la región.
Fuente y foto: EL MUNDO