La neurosis obsesiva es una alteración basada en obsesiones y pensamientos recurrentes. Conoce sus características y cómo identificar si la padeces.
La neurosis obsesiva, caracterizada por la rumiación de pensamientos y el deseo constante de control, es un trastorno que puede afectar significativamente la calidad de vida. Según los psicoanalistas, esta condición se vincula con un «super-yo» que induce culpabilidad en la persona, haciéndole creer que ha hecho algo impropio. El licenciado Guido Zannelli, de la Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires (APdeBA), advierte que para hablar de neurosis obsesiva se necesita un diagnóstico psicológico completo debido a la frecuente confusión de términos como neurosis y obsesión.
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Características de la Neurosis Obsesiva
Los síntomas de la neurosis obsesiva son fáciles de identificar y se manifiestan en la vida diaria. Entre ellos, Zannelli destaca la duda repetitiva sobre haber hecho o no algo, el chequeo constante de detalles, la presencia de ideas recurrentes, actos compulsivos, ritos mágicos sin base lógica, culpa insistente y angustia. Un rasgo típico es la separación entre pensamiento y emoción, donde la emoción se reprime suavemente, y el pensamiento se convierte en una herramienta concreta: “si no lo pienso, no sucede”.
Pensamiento vs. Acción
En la neurosis obsesiva, hay una clara división entre pensamiento y acción. Esto se traduce en un drama vincular, donde la persona necesita saber constantemente dónde están los demás, cuándo regresarán, o el significado de algo que se dijo. Esta necesidad de control puede llevar a interrogatorios y protocolos que atentan contra la espontaneidad y generan tensión y malestar.
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Tratamiento y Pronóstico
Afortunadamente, la neurosis obsesiva es tratable y los pronósticos suelen ser positivos. La psicoterapia es el tratamiento más indicado, siendo crucial el compromiso de la persona con el proceso terapéutico. El deseo de aliviar los síntomas, conocerse a sí mismo y comprender sus propios pensamientos y emociones son fundamentales para el éxito del tratamiento.