Los trabajadores, en su gran mayoría delegados, marcharon con sus pecheras verdes por las calles de la ciudad representando en su gran mayoría al sector de la salud y auxiliares de la educación. También se aprovechó la marcha para reprocharle a la justicia federal el reciente embargo dictaminado contra los bienes del dirigente local Félix González por 50 mil pesos.
Precisamente Félix González encabezó la columna de marchantes y en diálogo con la prensa manifestó «Hay un alto porcentaje (de adhesión al paro) de los distintos sectores que nos están acompañando para visibilizar la inconformidad ante la falta de cumplimiento a los distintos reclamos que estamos haciendo.
El dirigente remarcó que la movilización «También coincide con el mandamiento que nos envió el juzgado federal de embargo, asique pasamos frente al juzgado repudiando las actitudes por parte del juez Otranto».