El presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, reelegido para un segundo mandato, juró el cargo este miércoles en una ceremonia de investidura en el Union Buildings de Pretoria. Asistieron al acto una veintena de jefes de Estado y de gobierno, recibidos por músicos y bailarines locales. La ceremonia incluyó 21 cañonazos, la entonación del himno nacional y un despliegue de banderas nacionales por helicópteros militares.
Ramaphosa, líder del Congreso Nacional Africano (CNA), expresó en su discurso: «La formación de un gobierno de unidad nacional es un momento de profunda importancia. Es el comienzo de una nueva era». Al perder la mayoría absoluta, el ANC obtuvo solo 159 de los 400 escaños del Parlamento, lo que obliga a Ramaphosa a formar un gobierno de coalición y compartir el poder con parte de la oposición.
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El presidente sudafricano asumió el cargo comprometiéndose a ser fiel a la República de Sudáfrica y a promover los derechos de todos los sudafricanos. «Yo, Matamela Cyril Ramaphosa, juro que seré fiel a la República de Sudáfrica y obedeceré, observaré y mantendré la Constitución y todas las otras leyes de la República», afirmó.
El principal partido de la oposición, la Alianza Democrática (DA), con 87 diputados, aceptó el llamado de Ramaphosa para formar un gobierno de unidad, junto con el partido nacionalista zulú Inkatha Freedom Party (IFP), que obtuvo 17 escaños, y otros dos partidos más pequeños. Sin embargo, los radicales de izquierda Fighters for Economic Freedom (EFF), liderados por Julius Malema, y el partido uMkhonto weSizwe (MK) del expresidente Jacob Zuma, prometieron «aplastar» la alianza gubernamental «dirigida por blancos».
FUENTE: DW
FOTO: EPA.