En el juicio por la desaparición de Elvio Ángel Bel, que se desarrolla en Comodoro Rivadavia, declaró por viodeoconferencia este viernes el abogado de Trelew Eduardo Hualpa, quien fue nombrado por el cabo Carlos Alegre en su declaración el día anterior.
Hualpa ratificó los dichos de Alegre y confirmó que éste poseía una copia de la base de datos que se encontraba en la Base Almirante Zar de Trelew. Los datos de inteligencia se remontaban a la década del ’60 en adelante, incluso hasta la del 2000.
Ante la consulta del Juez, Hualpa sentenció: “Puedo decir con certeza que había una base de datos desde fines de los ’60 de personas de Trelew, Rawson y Gaiman”.
Agregó que “era una base de datos que me impactó porque había información de militantes de izquierdas, referentes sociales y vecinos”.
Respecto a este punto remarcó que “había una base de 13 mil de personas fichadas –por lo que deduce que había información de vecinos de fuera de la actividad política porque- no había tanta gente militante que justificara tremenda base de información “.
Incluso “me busque a mí y encontré a varios miembros de mi familia. La mía era hasta el ’96, eran dos páginas completas que tengo impresas; pero estoy seguro que no solo contenía datos de Bel sino de otros militantes”, respondió ante la consulta del Magistrado.
“Sí, esa base de datos la tuve en mi poder, Alegre me la trajo en unos disquetes y era el soporte del que estaba la Base A. Zar. Era la versión antigua de una que debía existir más actualizada”, consideró.
En dicha base de información “seguramente tenían de Bel porque tenían de todos los militantes”, reiteró.
Respecto a los disquetes que dijo haber observado en ese momento, respondió: “Los tuve brevemente porque Alegre me los mostró para ver la gravedad y la importancia de esa información”.
Ante la consulta del juez respecto a si existían copia, Hualpa reveló: “Yo tengo esa impresión de mi propia ficha pero si me dan 48 horas ubico copias de ese material porque entiendo que hay posibilidades obtener una copia del material”.
Ante la revelación, la documentación será aportada a la Justicia mientras que la copia del cabo Alegre fue requerida al Ministerio de Defensa de la Nación.