A raíz de la apreciación del peso argentino, los tours de compras hacia Chile se han duplicado, generando complicaciones tanto en la Aduana como en los comercios mendocinos.
A diario, alrededor de 55 micros cruzan el paso Cristo Redentor, procedentes de provincias como Mendoza, Córdoba, San Juan y Buenos Aires. Los viajeros se benefician de una diferencia de precios que oscila entre el 30% y el 70%, lo que está llevando a un aumento en la circulación de mercadería no solo en la región, sino en el comercio informal.
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El crecimiento de este fenómeno ha generado una serie de problemas logísticos en la Aduana, con demoras que superan las diez horas y dificultades para controlar el ingreso de productos, muchos de los cuales son revendidos en mercados informales de Mendoza. Los llamados “bagayeros” son quienes, contratados por los turistas, ingresan mercadería como electrodomésticos y ropa con marcas falsificadas, lo que complica aún más la situación.
A raíz de estos problemas, la Federación Económica de Mendoza ha expresado su preocupación por la caída de ventas en diversos sectores comerciales, como indumentaria y electrodomésticos. En su comunicado, los empresarios pidieron medidas urgentes para reforzar los controles en la frontera y combatir el contrabando de productos. También advirtieron que la situación pone en riesgo la competitividad de las pequeñas y medianas empresas locales, especialmente aquellas que operan en sectores como la indumentaria.
Fuente: Ámbito.