Las Fuerzas Armadas de Bolivia informaron sobre la toma de un cuartel en Cochabamba, donde soldados son mantenidos como rehenes por grupos irregulares.
Un grave incidente se ha desatado en Bolivia, donde fuerzas armadas irregulares han tomado el control de una instalación militar en Cochabamba, manteniendo a varios soldados como rehenes. Según un comunicado emitido por las Fuerzas Armadas, la situación se desarrolló el viernes en el trópico de Cochabamba, un área conocida por ser bastión del expresidente Evo Morales.
MIRÁ TAMBIÉN | Idaho suspende la provisión de vacunas contra el COVID-19
La toma del cuartel militar, perteneciente a la Unidad Militar Regimiento Cacique Juan Maraza en Villa Tunari, fue llevada a cabo por un grupo de campesinos que reaccionaron a las intervenciones policiales y militares contra bloqueos de carreteras organizados por un líder cocalero. Los manifestantes también saquearon armamento y municiones de la instalación, lo que ha intensificado la preocupación por la seguridad de los soldados secuestrados.
Las Fuerzas Armadas han hecho un llamado urgente a los invasores para que depongan sus armas y liberen a los rehenes, instando a que se actúe de manera pacífica y se respeten los derechos humanos. «La vida de mis instructores y soldados está en peligro», advirtió un militar secuestrado en un video que circuló en medios locales, reflejando la tensión y el miedo que se vive en la zona.
MIRÁ TAMBIÉN | Israel dice haber matado otro alto cargo de Hamás en Gaza
El conflicto en Cochabamba es un reflejo de la creciente polarización en el país, donde los conflictos por tierras y recursos han llevado a enfrentamientos entre grupos sociales y las autoridades. La intervención del gobierno en las protestas de los campesinos ha desencadenado reacciones violentas, lo que agrava la crisis social y política en Bolivia.
Las autoridades bolivianas se encuentran en una encrucijada, ya que deben manejar la situación de forma que se salvaguarde la integridad de los militares secuestrados y se restablezca el orden sin escalar la violencia. La comunidad internacional está atenta a los acontecimientos, mientras la población local exige una solución pacífica a esta alarmante situación.
Fuente: Reuters
Foto: Telesur