Los hechos ocurrieron en la zona sur de Trelew; en las calles aledañas a la seccional Cuarta, con veinticuatro horas de diferencia y parece que el autor fue alguien que conoce a los policías. Por suerte el fuego pudo ser extinguido antes que se desarrollara sobre los vehículos o que se propagara hacia otros estacionados al lado.
El primer caso se dio a minutos de la medianoche del jueves y el damnificado fue el oficial Pablo Ortiz, quien se encontraba trabajando en ese momento. A Ortiz le arrojaron aparentemente combustible y luego algo encendido sobre su vehículo, cuando éste se encontraba estacionado sobre la calle Piedrabuena casi Juan Manuel de Rosas; a un costado de la comisaría.
El otro episodio sucedió la noche de este viernes, alrededor de las 23 cuando pretendieron incendiarle el coche al cabo Arrative, quien también se encontraba de servicio al momento del hecho.
El auto de Arrative, un Volkswagen Voyage de color claro (foto) se hallaba estacionado sobre la calle Sargento Cabral, casi al frente de la dependencia policial.
¿Cuál puede llegar a ser la lógica de estos atentados? Es lo que se está investigando mientras las autoridades indagan la existencia de cámaras de seguridad en las viviendas aledañas a la comisaría Cuarta.