El vehículo, un Citröen C4, fue incendiado aparentemente con una “bomba Molotov” mientras se encontraba estacionado en el frente del domicilio de su propietario; un empleado policial que participó el martes pasado de un allanamiento en el que buscando una motocicleta robada terminaron hallando un kilo y medio de marihuana y cree –según trascendió- que el atentado tuvo que ver con ese procedimiento.
El violento suceso se registró alrededor de las 22 en la calle Gales al 4400. Cuando llegaron los bomberos el fuego ya había dañado notablemente el habitáculo del rodado y se estaba propagando hacia la carrocería. Por suerte lograron apagarlo antes de que siguiera avanzando y destruyendo el rodado.