El ataque frente a las costas indias, que de momento no fue reivindicado, provocó un incendio a bordo, luego sofocado, según la agencia de seguridad marítima del Ejército británico, Ukmto.
Ambrey, una empresa de seguridad marítima, precisó que el buque, con pabellón de Liberia y cargado de productos químicos, estaba relacionado con intereses israelíes.
El barco «hizo escala en Arabia Saudita y se dirigía a India», añadió Ambrey, replicó la agencia de noticias AFP.
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Las dos agencias señalaron que el ataque se produjo a unos 370 kilómetros al suroeste del puerto indio de Veraval.
En las últimas semanas se produjeron numerosos ataques de drones y misiles contra embarcaciones en el mar Rojo, cometidos por los rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán.
Los hutíes dicen actuar así en solidaridad con los palestinos de Gaza, e insisten en que seguirán atacando mientras no entren suficientes cantidades de comida y medicamentos en este territorio asediado por Israel tras el inicio de la guerra con el movimiento islamista palestino Hamas el 7 de octubre.
Estados Unidos también acusó a Irán de llevar a cabo ataques cerca de sus aguas territoriales.
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El mes pasado, un carguero de propiedad israelí resultó dañado en un ataque con drones, supuestamente cometidos por los Guardianes de la Revolución iraníes en el océano Índico, de acuerdo con un responsable norteamericano.
Hoy, un responsable de los Guardianes de la Revolución advirtió que habría incidentes en otras aguas si Israel no cesaba sus ataques contra Hamas.
«Si siguen estos crímenes, Estados Unidos y sus aliados verán nacer nuevos poderes de resistencia y el cierre de otras vías navegables», afirmó Mohammad Reza Naqdi, citado por la agencia de prensa iraní Tasnim.
«Pronto verán el cierre del mar Mediterráneo, de Gibraltar y de otras vías navegables», agregó.
Los crecientes ataques en las rutas marítimas desde el 7 de octubre incitaron a las grandes empresas de transportes a redirigir sus navíos hacia el extremo sur de África.