Desde abandonar el despertador hasta desconectar de las redes sociales, los expertos recomiendan prácticas para recuperar el bienestar físico y mental.
Desconectarse de la rutina al iniciar las vacaciones puede ser un desafío. Según la doctora Ingrid Brunke, médica del Instituto de Neurociencias del Hospital Alemán, el estrés acumulado afecta al cerebro, alterando neurotransmisores y desencadenando síntomas físicos y emocionales, como contracturas, insomnio y ansiedad. Este fenómeno se conoce como «estrés vacacional» o «depresión de la reposera».
En este estado, algunas personas enfrentan dificultades para relajarse y se sienten agotadas, con alteraciones del sueño, el apetito y el ánimo. Según la psicóloga Silvia Sumell Canalda, estos síntomas incluyen problemas de atención, cansancio extremo y sentimientos de tristeza e irritabilidad.
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Cómo desconectarse y disfrutar de las vacaciones
La clave para lograr un descanso efectivo es equilibrar planificación y espontaneidad. Los expertos sugieren:
- Desconectar de las redes sociales: Usarlas en horarios breves y programados.
- Evitar excesos: Controlar el consumo de alcohol y alimentos hipercalóricos.
- Elegir actividades placenteras: Realizar ejercicio, leer o practicar pasatiempos.
- Modificar el lenguaje interno: Cambiar «Tengo que…» por «Me gustaría…».
- Cuidar el sueño: Dormir con la luz apagada, sin dispositivos electrónicos, y reservar la cama solo para descansar.
Además, técnicas como la respiración consciente y la atención plena ayudan a reducir el estrés y reprogramar el cerebro para un descanso reparador. Según la doctora Brunke, un buen descanso físico y mental también favorece la salud metabólica, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes.
Con información de Diario Norte.
Foto: Pexels.