Un nuevo invento podría marcar un antes y un después en la prevención de enfermedades neurodegenerativas entre los futbolistas. Se trata de la Proteckthor B1, una cinta desarrollada por la empresa española de Carlos Pelayo, que tiene la capacidad de reducir hasta un 93% el daño cerebral causado por los impactos repetidos de cabeza con el balón, una de las principales preocupaciones en la salud deportiva actual.
Pelayo explicó que su iniciativa surgió tras investigar diversos casos vinculados al deterioro cerebral en jugadores de fútbol. En diálogo con Men’s Health, recordó que incluso en California se prohibieron los cabezazos en menores de 11 años, y que en un estudio sobre 1.500 futbolistas fallecidos en cancha, un 5% de los casos se debió a traumatismos craneales. Esto lo motivó a diseñar una solución práctica, liviana y adaptable a la indumentaria deportiva.
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La Proteckthor B1 puede utilizarse no solo en fútbol, sino también en cualquier disciplina donde exista riesgo de golpes en la cabeza. Sin embargo, por el momento las pruebas se centraron en el fútbol profesional. Pelayo no dudó en señalar que sería ideal que referentes como Cristiano Ronaldo adoptaran la cinta, tanto por su estilo de juego como por el poder de influencia que tienen en el mundo del deporte.
A pesar de las claras ventajas, el creador del dispositivo lamenta que el fútbol aún sea reticente a incorporar este tipo de avances tecnológicos. “Es un deporte un poco antiguo. Cuesta convencerlos de que cualquier protección es buena y que no molesta ni afecta el rendimiento”, afirmó Pelayo, quien insiste en que el uso obligatorio es solo cuestión de tiempo.
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El invento llega en un contexto de creciente preocupación por los efectos a largo plazo de los cabezazos en el fútbol. Con estudios que vinculan el juego aéreo con enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson, la cinta Proteckthor B1 podría convertirse en una herramienta clave para preservar la salud cerebral de futuras generaciones de futbolistas.
Fuente: Óle.
Foto: Proteckthor