La movilización denunciaba “una política regresiva que favorece a la extrema derecha”. Esta política “pisotea cada vez más nuestras libertades públicas, nuestro modelo social, nuestro futuro frente al colapso ecológico”, argumentaron las diversas agrupaciones convocantes en un comunicado.
Se esperaban unos 30.000 asistentes a las manifestaciones, convocadas por organizaciones de izquierda.
El Ministerio del Interior desplegó entre 130 y 150 unidades móviles de Policía en toda Francia, lo que supone unos 30.000 policías y gendarmes, además del trabajo de los servicios de inteligencia, informó la agencia de noticias Europa Press.
Durante la marcha en París, un policía sacó su pistola y apuntó a la multitud después de que el patrullero en el que se movilizaba fuera atacado con barras de hierro por un grupo de manifestantes tras quedar atascado en el tránsito.
Télam y ResidentsCorner