El fabricante de automóviles Volvo anunció este lunes 26 de mayo que recortará 3.000 puestos de trabajo, principalmente en Suecia, en el marco de un plan de ahorro por 18.000 millones de coronas suecas (unos 1.600 millones de euros).
La medida afecta al 15% del personal administrativo de la compañía y se suma a la eliminación de 1.000 empleos ocupados por consultores, también en su mayoría en territorio sueco. Volvo es propiedad del grupo chino Geely desde 2010.
“Este plan tiene como objetivo fortalecer y hacer más resistente a Volvo Cars en un momento en que la industria automotriz enfrenta desafíos considerables en su entorno externo”, informó el grupo en un comunicado oficial.
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La compañía enfrenta una fuerte presión por la desaceleración del mercado automotor global, el aumento de costos de producción y la transición hacia vehículos eléctricos. En ese contexto, busca mejorar su flujo de caja y reducir costos estructurales.
“La industria automotriz atraviesa un período difícil. Para afrontarlo debemos mejorar nuestro flujo de caja y reducir estructuralmente nuestros costos”, sostuvo el director general Håkan Samuelsson.
Según datos oficiales, Volvo empleaba unas 42.600 personas a tiempo completo a diciembre de 2024. El anuncio se suma a otros ajustes adoptados recientemente por empresas del sector ante la caída de la demanda y la incertidumbre económica mundial.
Fuente: RFI.