Este domingo, en el contacto habitual con Radio 3, Sebastián Cuattromo, cofundador de Adultxs por los Derechos de la Infancia, repasó una vez más la importancia de la visibilización del abuso sexual infantil como una de las vías fundamentales para comenzar a cambiar esta realidad así como también para poder como sociedad estar preparados para acompañar y ayudar a las víctimas actuales y sobrevivientes de este delito en sus infancias.
De esta forma, Cuattromo subrayó que “estamos convencidos que la suerte de la infancia es una cuestión del conjunto de la comunidad adulta y del Estado como garante de los Derechos. No hay persona adulta de buena voluntad que pueda sentirse indiferente frente a la obligación de adoptar un compromiso activo por el cuidado de los niños y frente al abuso sexual”.
En este sentido “la visibilización es fundamental” revelando que desde Adultxs, con el transcurso de los años, esto “con gran esperanza lo vemos, en cómo avanza nuestra causa en todo el país”.
La visibilización no solo del delito sino también de los sobrevivientes y adultos comprometidos con la defensa de las infancias “genera condiciones para que esto cambie, para que cambien las instituciones como el Estado y sus Poderes, para lo cual se necesita mucha fuerza social”.
En este sentido, el cofundador de Adultxs se refirió al Grooming, un delito “que forma parte de nuestra lucha y que también avanza en la visibilización y concienciación”, enfatizando que el grooming “viene a demostrar es que el abuso sexual ni siquiera requiere de un contacto físico para provocar un daño en la emocionalidad y subjetividad de los niños”.
El accionar de un adulto “de manera psicopáticas y manipulando a un niño, avasallándolo, produce un daño emocional y psicológico igual a cuando hay contacto físico. El grooming es un ejemplo de lo que implica el abuso sexual en un sentido amplio”, sentenció.
Además, siguiendo esta línea, Cuattromo volvió a reiterar que es importante “ver qué tipos de discursos y mensajes construimos y transmitimos como sociedad adulta. Nada es inocuo, nada cae en saco roto –y- los mensajes que transmitimos a las infancias que hoy sufren este delito, también les llegan”.
Estos mensajes “les significas percibir si la sociedad es empática, solidaria o está dispuesta a ayudarlas y escucharlas. Este es uno de los sentidos que siempre tratamos de enfocar”.
De esta forma, el cofundador de Adultxs repasó su historia personal y explicó que el no poder hablar les genera a las víctimas “silencio y soledad. Al trauma y herida –que genera el abuso sexual, se suma- la orfandad y desamparo”.
Esto porque “pese a que un niño está rodado de adultos, esos adultos no le inspiran confianza como para poder pedir ayudar o ponerlo en palabras”.
En este punto, interpeló a la sociedad adulta en su conjunto ya que repasó que los menores “viven rodeados de personas adultas, en el ámbito educativos, barrial y social –entonces- cómo puede ser que 1 de cada 5 niños sea víctima de este delito”, se preguntó.
“El planteo y reflexión critica que hacemos es cómo puede ser que esto suceda y tantos niños y sobrevivientes estén en silencio y soledad, si estamos hablando que hay entornos sociales de los cuales todos formamos parte”, apuntó.
Es por ello que insistió en “habilitar la palabra” a las víctimas y sobrevivientes, por un lado a través del sistema educativo y la implementación efectiva de la ESI “para que allí, como sujetos de derechos, tengan contexto y condiciones que les habiliten la palabra en un sentido amplio”.
Por otro lado, en tanto, como sociedad e individuos debemos “habilitar la palabra -ya que- a cualquiera nos puede pasar, en cualquier momento o circunstancia, que alguien nos puede elegir para confiarnos esto”.
Y “si sabemos retribuir esa confianza con empatía, solidaridad y respeto, le podemos hacer mucho bien a la persona que viene a contarnos este dolor”, reveló.
“Como sociedad adulta tenemos que estar preparados para que, si alguien nos elige para confiarnos algo así, estemos a la altura de las circunstancias porque si lo hacemos, el beneficio que se le provoca a la persona que comparte ese dolor es muy grande e inicia un camino de recuperación”, insistió.
Por último, refirió la importancia de la escucha empática y la solidaridad, ya que “la vergüenza y la culpa es una de las injusticias más grandes con la que tenemos que lidiar las víctimas de abuso”.
Cuattromo consideró que “esa carga de culpa o vergüenza que uno lleva por lo que está sufriendo”, puede estar relacionado a que “quien comete el abuso es una persona de máxima confianza, a la que los niños quieren, de la que necesitan. Hablamos de progenitores, padrastros, abuelos, tíos, hermanos, primos, madres, docentes o entrenadores”.
“Siempre hablamos de personas con vínculos de cuidado, cariño y poder con respecto a esos niños. Por eso es tan delicado a nivel emocional y subjetivo”, agregó.
Para concluir, informó que el próximo jueves 19 de noviembre es el Día Internacional de Lucha Contra el Abuso Sexual, previo al 20 de noviembre, Día de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes.
En este contexto, el jueves “Adultxs brindaremos nuestro testimonio para todos los chubutenses en una actividad que se realizará en Puerto Madryn, organizada por la Intendencia y el Concejo Deliberante”.
Allí, “expondrán dos profesionales. Una médica especialista en psiquiatría y una jueza de Madryn. Nosotros sumaremos nuestros testimonios como sobrevivientes y la experiencia colectiva de Adultxs”, concluyó.