El 1° de mayo de 1994, Ayrton Senna perdió la vida en un trágico accidente en el circuito de Imola, pero su legado perdura. Con 41 victorias y tres campeonatos mundiales, Senna se destacó por su destreza y carisma dentro y fuera de la pista. Desde su infancia en San Pablo hasta su paso por la Fórmula 1, su influencia sigue vigente.
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Nacido en 1960, Senna demostró su pasión por el karting desde temprana edad. Su habilidad bajo la lluvia se forjó en el kartódromo de Interlagos, donde ganó su primer título a los 13 años. Tras competir en karting durante su juventud, Senna incursionó en monoplazas en Inglaterra antes de llegar a la Fórmula 1 en 1984.
Con Toleman, Lotus y finalmente McLaren, Senna dejó su marca en la F1 con su velocidad en clasificación y su capacidad para ganar carreras imposibles. Su rivalidad con Alain Prost y su trágico accidente en Imola son parte de su legado, que trasciende las pistas de carreras.
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Su fallecimiento conmocionó al mundo y su funeral en San Pablo fue seguido por millones. Hoy, su legado vive a través de la Fundación Instituto Ayrton Senna, que ayuda a niños necesitados en Brasil.
Fuente: Noticias Argentinas.
Foto: Auto Test.
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